lunes, 26 de octubre de 2015

Alternativas biológicas para el combate de plagas

Por Gilda Y. Andrade Michel y María Guadalupe Velarde Aguilar

La naturaleza tiene complejos mecanismos que le permiten mantener un “equilibrio ideal”, y esto provoca un óptimo funcionamiento entre cada pequeña parte que la conforma, desde los organismos microscópicos hasta los grandes animales y plantas. Cuando se altera este “equilibrio ideal” es cuando surgen serios problemas como la extinción de especies o la desertificación.
Desde tiempos remotos se han hecho observaciones minuciosas a la dinámica que se lleva a cabo dentro de los ecosistemas (sapos comiendo mosquitos, mariquitas comiendo otros insectos más pequeños), y los científicos han encontrado respuestas interesantes para tratar de revertir o controlar los daños al ambiente. 

Plagas
Cualquier ser vivo puede ser una plaga cuando el tamaño de su población causa daños a otros, y cuando estos daños producen grandes pérdidas económicas. Para controlar una plaga es muy común aplicar productos químicos, que son altamente efectivos pero cuentan con una enorme lista de desventajas, comenzando por el daño de los suelos, continuando con la toxicidad hacia otras especies que no son plaga, y concluyendo con el aumento de dosis requeridas porque las plagas se hacen resistentes al producto.

En plena era tecnológica es difícil imaginar que para el combate de ciertas plagas agrícolas, se puedan aplicar organismos vivos que actúan como soldaditos contra las plagas.
Recordando que este 2015 es el año Internacional de los Suelos y fomentando su protección, se ha estado popularizando un tipo muy particular de control de plagas: el Control Biológico.

El Control Biológico es la eliminación-reducción de plagas o parásitos utilizando otros seres vivos (que sean sus enemigos naturales), sin afectar el ambiente. Se debe tener mucho cuidado al introducir alguna especie para que funja como enemigo natural de la plaga en cuestión, debido a que hay “agentes de control biológico” llamados generalistas, (pueden ser bacterias, insectos, hongos, plantas, vertebrados) que además de consumir a la plaga se comen a otros organismos que son parte del ecosistema, y clave para el desarrollo de otros organismos. Por otro lado existen los agentes especialistas, que sólo se alimentan o son enemigos naturales de la plaga, y no dañan a quienes pueden tener funciones cruciales dentro del ecosistema. A continuación te mostraremos algunos ejemplos de enemigos naturales para el combate de plagas.

Insectos
Existen diversos programas para controlar plagas en nuestro país, en los cuales están implicados los insectos entomófagos (insectos que comen insectos). Algunos buscan a sus víctimas (como las catarinas) éstos son los –depredadores-; mientras que otros crecen dentro de su presa hasta causar su muerte, a estos se les llama –parasitoides- (avispitas y moscas). En México se utilizan insectos para combatir plagas que afectan a cítricos, ciruela, alcachofa, café, guayaba, hortalizas, mango, entre otros.

Hongos
No todos los hongos son como los champiñones, también los hay microscópicos que actúan como descomponedores o degradadores de materia orgánica, que es un rol muy importante en la naturaleza, y ciertas especies de éstos son parasitarias. En control biológico tenemos hongos entomopatógenos (que comen insectos y arácnidos) y los nematófagos (que comen nemátodos [gusanos redondos]).
 Las esporas de los hongos que se dispersan en el ambiente se pegan a los insectos, degradan el exterior de su cuerpo y se introducen para terminar su comida. En nuestro país se utilizan hongos entomopatógenos para controlar plagas como el HLB o dragón amarillo en cítricos, el pulgón café (que afecta a cítricos también), la langosta centroamericana (afecta a varios cultivos: maíz, ajonjolí, sorgo, algodón, caña de azúcar, entre otros) y la broca del café (plaga que afecta plantaciones de café).
Los hongos nematófagos tienen un futuro prometedor en la industria ganadera, se han administrado vía oral en el alimento o galletitas especiales de las vacas, ovejas, chivos y caballos para reducir los parásitos.


Bacterias
Bacilus thuringenisis (Bt) es una bacteria mundialmente utilizada en el control de mosquitos y otros artrópodos, que no sólo transmiten enfermedades al hombre (como el dengue), sino también a los cultivos. Esta bacteria produce toxinas que entran al tracto digestivo del insecto, se pegan al intestino y perforan sus células. Bt no es tóxica para reptiles, aves, peces, mamíferos, incluyendo a los humanos.

Plantas
¡A que no te imaginabas que la protagonista del día de muertos es clave para el control de nemátodos e insectos! Se ha reportado que Tagetes filifolia, pariente de la flor de Cempoalxóchitl o cempasúchil, con sus aceites esenciales de olor anisado, actúa como repelente de la mosquita blanca (transmisora de virus que pueden causar daños importantes a los cultivos). El modo de uso es plantarla intercalada con otras plantas. Otras especies de cempasúchil como Tagetes erecta se utilizan para rehabilitar suelos y prepararlos para que se vuelva a sembrar en ellos, además esta especie elimina la “gallina ciega” (que acaba con las raíces secando las plantas); también se utiliza para controlar los nemátodos. Lo anterior gracias a sus piretrinas y tiofenos (sustancias vegetales responsables de sus efectos contra insectos y gusanos). Así que ya lo sabes, planta tus flores después de las festividades para evitar plagas en tu jardín.

Además de los ejemplos mencionados, tenemos otros más cotidianos como las lagartijas o cuijas que son depredadoras de plagas de insectos; asimismo los sapos, ranas, peces y murciélagos se alimentan de una gran cantidad de insectos, y de este modo mantienen el control de las poblaciones.




Publicado en la edición semanal de El Comentario  
Lunes 26 de octubre de 2015
Número 227, páginas 24 y 25

Créditos fotos:
Foto anís de monte: Pedro Tenorio Lezama (conabio)
Gettyimages
Fuentes:
1)    Serrato-Cruz, M. A. Julio-Agosto 2004. Cempoalxóchitl: Diversidad Biológica y usos. Revista Ciencia y Desarrollo en Internet.
2)    Acevedo-Ramírez, P., Quiroz-Romero, H., Mendoza-De Gives, P., Rendón-Gómez, J. L. Noviembre-Diciembre 2013. Una red microscópica en la lucha por sobrevivir. Ciencia Y Desarrollo.

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